Saltar al contenido principal

Los castells

Los ‘castells’ son torres humanas de hasta diez pisos levantados por ‘colles castelleres’ (grupos organizados que levantan estas torres) en Cataluña desde hace más de 200 años. Se trata, sin duda, de una potente manifestación de la cultura popular de raíz tradicional que conjuga la espectacularidad, la belleza plástica y, al mismo tiempo, valores sociales y cívicos remarcables.

Los ‘castells’ nacen a caballo entre finales del siglo XVIII e inicios del XIX en la zona del Camp de Tarragona y el Penedès, pero en los últimos 50 años se han extendido por toda Cataluña e incluso más allá. De hecho, en pleno siglo XXI los ‘castells’ viven el mejor momento de su historia, con cerca de 100 ‘colles castelleres’ que realizan las construcciones más difíciles. Este momento dulce se completa con una importante proyección mediática y un reconocido prestigio, concretado en la inclusión de los ‘castells’ en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco en 2010.

Este éxito está motivado por el hecho que los ‘castells’, a pesar de ser una actividad de raíz tradicional que mantiene buena parte de sus atractivos originales, también han sabido adaptarse a los nuevos tiempos en cuestiones como la incorporación de la mujer –inicialmente era una actividad exclusivamente masculina-; la disminución del riesgo –por ejemplo, con la incorporación de un casco especial que protege a los niños; o la apertura a la sociedad en general. Los ‘castells’ son tradicionales, sí, pero a la vez radicalmente modernos.

Además, los ‘castells’ ofrecen a la sociedad contemporánea valores que a menudo no son fáciles de encontrar, como la solidaridad, el trabajo en equipo, el amateurismo, el funcionamiento interno democrático... Los ‘castells’ son una actividad abierta a todo el mundo, en la que participan juntos hombres y mujeres, mayores y pequeños, de cualquier origen y de cualquier estatus económico, cultural o social. Por tanto, es también una actividad con una gran capacidad de integración y cohesión social.

Es importante remarcar el carácter amateur de la actividad. Los componentes de las ‘colles castelleres’ no son atletas ni artistas de circo, aunque es necesaria una buena forma física para ocupar determinadas posiciones y muchas horas de ensayo colectivo para levantar las construcciones humanas. Son hombres y mujeres corrientes que se reúnen para disfrutar de una actividad que les apasiona.

creativat.com